Los alimentos que manchan más los dientes

Hoy más que nunca, ponemos especial atención al estado de nuestros dientes. Tanto por motivos de salud como estéticos. En este último de los casos, la estética, una de nuestras mayores preocupaciones es tratar de lucir siempre una sonrisa brillante. Probablemente, hayas escuchado o leído que ciertos alimentos están detrás de las manchas que aparecen en tus dientes. Por supuesto, el tabaquismo, un cepillado dental deficiente o algunos medicamentos provocan que nuestros dientes cambien de tonalidad o se vuelvan completamente amarillos. Sin embargo, también hay muchos alimentos o bebidas que originan el cambio de color en el esmalte dental.

Si bien mantener una buena higiene dental a diario es la mejor medida para evitar que tus dientes se manchen o cambie de color, evitar el consumo desmedido de ciertos alimentos también puede ser de gran ayuda. De estos productos es de lo que te vamos a hablar en el artículo de hoy. No obstante, antes de mostrarte cuáles son los alimentos que tiñen más tus dientes, queremos subrayar que no es necesario que dejes de disfrutar de ningún tipo de comida. Lo más importante de todo es: cepillarse correctamente los dientes después de cada comida. Respecto a los alimentos, lo conveniente es que no abuses de ellos. Ahora sí, veamos los alimentos que más manchan los dientes.

Los cinco alimentos que manchan más los dientes

1. Café: el café es la bebida que más daño provoca en el esmalte de los dientes. Por desgracia, su consumo está generalizado en nuestra sociedad, y evitarlo quizás no sea algo que puedas cumplir. El café contiene muchos ácidos que dañan el esmalte dental. Asimismo, el propio color de esta bebida provoca que nuestros dientes adquieran un tono amarillento, o bien que aparezcan manchas negras en su superficie. Obviamente, si decides dejar de consumirlo evitarás cualquier tipo de daño en tu esmalte.

No obstante, en caso de que no seas capaz de abandonar su consumo, te recomendamos que al menos lo moderes. Por ejemplo, puedes tomar una sola taza de café al día. Sin embargo, lo más importante es que, sea cual la cantidad de café que tomes al día, te cepilles los dientes después de cada ingesta.

2. Vino tinto: tras el café, el vino tinto es la bebida que más tiñe tus dientes. Por un lado, contiene ácidos que degradan el esmalte hasta que este se vuelve más propenso a capturar los pigmentos. El vino tinto contiene antocianinas –el pigmento que le da ese tono oscuro- y taninos que ayudan a que los pigmentos se adhieran a la superficie de los dientes. Por esta razón, los dientes de los consumidores frecuentes de esta bebida suelen presentar un característico tono color rojizo, así como pequeñas manchas de color rojo-marrón.

3. Té: de nuevo, una bebida es la principal causa de que tus dientes no conserven su blanco natural. En este caso, hablamos del té negro. Este producto contiene taninos al igual que el café o el vino tinto. Como hemos señalado, los taninos favorecen a que los pigmentos se unan a la superficie de tus dientes. Sin embargo, el té negro afecta también de otras maneras a la salud bucodental. Consumir grandes cantidades de esta bebida favorece la acumulación de sarro, retiene las bacterias y, por último, aumenta las probabilidades de desarrollar caries. Para contrarrestar sus efectos, debes beberlo con mucha moderación.

4. Cacao: cuando se toma de forma moderada y este contiene una alta concentración (+70%), provoca justo lo contrario. El cacao tomado con moderación, ayuda a mantener el esmalte de los dientes. Ahora bien, el problema viene cuando se toma de manera desproporcionada y, por ejemplo, mezclado con leche. Los chocolates menos puros –es decir, con menor concentración de cacao-, por su alta concentración en azúcar, favorecen la aparición de caries y manchas en los dientes. Por lo tanto, para evitar este problema lo ideal es que tomes chocolate muy puro y en cantidades moderadas.

5. Bebidas energéticas y azucaradas: tras una sesión intensa de entreno, lo normal es que tomemos bebidas isotónicas o refrescos azucarados para hidratarnos y recuperar las sales minerales. Sin embargo, la gran mayoría de estas bebidas contienen un alto contenido en ácidos que destruyen el esmalte dental y fomentan el desarrollo de las caries. ¡Ojo!, que no estamos exagerando ni un ápice. Se estima que estas bebidas contienen un pH de tan solo 2,82, es decir, son mucho más ácidos que el limón.

Por lo tanto, si eres una persona deportista, te recomendamos que tomes estas bebidas con moderación. Asimismo, no olvides cepillarte los dientes media hora después de haberlas consumido. Antes no, puesto que los propios componentes de la pasta dentífrica pueden acentuar el efecto de los ácidos de las bebidas isotónicas.

Otros productos: la salsa de soja, los vinagres –en especial, el de Módena- o los zumos de frutas, por contener muchos azúcares y ácidos, también dañan el esmalte dental. Así pues, trata de moderar su consumo. Además, no olvides cepillarte los dientes 30 minutos después de haberlos ingerido, al igual que sucede con las bebidas isotónicas.

El tabaco también tiñe los dientes

Al margen de los alimentos, hay un producto que tiñe los dientes como ninguno otro. Hablamos, por supuesto, del tabaco. Si bien no es un alimento, su consumo es tan generalizado que merece la pena mencionarlo. El tabaco contiene productos como la nicotina y el alquitrán que oscurecen el esmalte hasta dejar los dientes con un desagradable tono amarillo o marrón. Incluso, una buena higiene dental no nos garantiza que el tabaco no cambie el color de nuestros dientes. Además, su consumo diario también favorece al desarrollo de enfermedades graves en las encías.

Alimentos que ayudan a mantener el blanco de tus dientes

No todo son malas noticias. Ni mucho menos. Lo cierto es que también hay alimentos que pueden contribuir justo a lo contrario. Es decir, a blanquear tus dientes. Algunos de estos productos son:

1. Coliflor: para ingerir la coliflor se necesita masticarla durante mucho tiempo. Como bien sabes, al masticar segregamos más saliva. La saliva actúa como un limpiador natural de nuestra boca.

2. Fresas: las fresas contienen una enzima que hace que los dientes se conserven blancos.

3. Lácteos: la leche, el queso o el yogur, contienen ácido láctico. Este componente fortalece el esmalte de tus dientes y, además, lo blanquea.

¿Tienes los dientes amarillos, marrones o con manchas negras? ¿Te cepillas correctamente los dientes, pero no conservas su color blanco? Si es así, no dudes en visitar nuestra clínica de Praxis Dental en Toledo. Quizás, lo que necesites sea un blanqueamiento dental. Somos especialistas en el blanqueamiento de tus dientes. ¡Te esperamos!