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Preguntas más comunes de pacientes a dentistas

Fecha publicación: 28/11/2024

No te sorprenderá descubrir que las preguntas más habituales al dentista suelen ser las mismas en muchos pacientes. Como especialista en Odontología, en nuestra clínica Praxis Dental Toledo, situada en Bargas (Toledo), nos hemos encontrado con una amplia variedad de cuestiones planteadas por nuestros pacientes. Es crucial ofrecer información precisa y comprensible para aclarar dudas y promover el cuidado dental efectivo. En este escrito, nos centraremos en las 10 cuestiones más comunes al odontólogo, ofreciendo respuestas detalladas y prácticas.

Las 10 preguntas más frecuentes realizadas al dentista

¿Para qué sirve la revisión dental y cada cuánto tiempo hay que hacerla?

Los chequeos dentales consisten en identificar todo lo que ocurre dentro de la boca (piezas dentales, encías, tejidos blandos, lengua...) con el objetivo de detectar y/o descartar patologías bucodentales de manera oportuna. Se trata de visitas frecuentes al dentista de parte de los pacientes para valorar la salud de sus dientes y encías. Durante los chequeos dentales, el dentista examinará de forma concienzuda la cavidad oral del paciente para detectar indicios de caries dentales, gingivitis, periodontitis, cáncer bucal y otras patologías. Se recomienda someterse a un chequeo dental, al menos, una vez cada año. Cuando el paciente presenta problemas periodontales o una determinada predisposición a desarrollar caries dental, se aconseja visitar al dentista cada 6 meses.

¿Qué cuidados básicos son necesarios para mantener la salud oral?

Lo primero y más importante: llevar una rutina de higiene bucodental adecuada. Esto implica, por un lado, cepillarse los dientes al menos 3 veces al día (después del desayuno, la comida y la cena) durante 2 minutos correctamente (además, es importante renovar el cepillo cada 3 meses). Por otra parte, también se recomienda usar seda o hilo dental como complemento al cepillado. Además, es importante hacerse chequeos dentales con frecuencia y acudir a la clínica si se detecta alguna alteración bucodental. También se aconseja no abusar de los alimentos ricos en azúcares (aumentan las probabilidades de desarrollar caries), eludir el picoteo ente las comidas, utilizar pastas de dientes no abrasivas con flúor y evitar el tabaco.

¿Cuántas veces y cuándo debo cepillarme los dientes?

Como ya se ha indicado, lo ideal es cepillarse los dientes tras cada una de las comidas principales del día. Sin embargo, el cepillado resulta aún más esencial durante la mañana y antes de irse a dormir. Durante este periodo (mañana y noche), es cuando las bacterias de la boca llevan a cabo la mayor parte de su actividad. Además, es importante también esperar media hora después de comer antes de cepillarse los dientes. Esto se debe a que nuestra boca necesita alrededor de 30 minutos para recuperar sus niveles de acidez tras haber comido. Por último, utilizar la seda dental y los colutorios bucales pueden complementar significativamente la rutina del cepillado.

¿Qué función tienen los enjuagues bucales y el hilo dental?

Los colutorios o enjuagues son soluciones líquidas que se emplean como complemento al cepillado de los dientes. Bajo ningún concepto los colutorios han de emplearse para reemplazar el cepillado dental. Los enjuagues bucales fortalecen el esmalte de los dientes, disminuyen la sensibilidad dental, eliminan bacterias (hasta el 97% de los microorganismos que quedan tras el cepillado) y evitan el mal aliento (halitosis). Además, proporcionan una sensación de mayor frescor en la cavidad oral. Respecto al hilo o seda dental, favorecen una mejor higiene de las áreas interproximales, dado que llegan donde el cepillo dental no puede. De esta manera, el hilo o seda dental eliminan la placa bacteriana y los restos de comida que hayan podido quedan en los espacios interdentales tras el cepillado. Se aconseja usar hilo o seda dental al menos una vez al día (preferiblemente, tras el cepillado de antes de irse a dormir). No usar hilo dental permite que la placa bacteria se acumule en mayor medida en la boca, favoreciendo el desarrollo de enfermedades dentales como caries, gingivitis y periodontitis.

¿A qué edad hay que ir por primera vez al dentista?

Lo ideal es que la primera visita o chequeo dental se lleve a cabo cuando salen los primeros dientes de leche, es decir, al año de edad. Se aconseja que la primera visita al dentista sea cuando comienzan a salir los primeros dientes, aproximadamente al año de edad. Esta primera visita es muy beneficiosa para establecer un vínculo con el dentista y también para generar confianza, de esta manera se previenen futuros miedos. Para el caso del ortodoncista, es aconsejable acudir a él antes de que el niño comience a cambiar los dientes de leche por los definitivos, aproximadamente a los 5 años.

¿Cómo se puede evitar el miedo al dentista?

La odontofobia o miedo al dentista, es un miedo irracional que experimenta alrededor del 15% de la población española a la hora de visitar una clínica dental. La confianza en los especialistas en odontología, una comunicación entre profesionales y pacientes adecuada y la información en detalle de las características de los tratamientos son factores que ayudan a superar este tipo de miedos. Además, la experiencia profesional del dentista y su trato con el paciente son también determinantes a la hora de evitar la odontofobia. Asimismo, se aconseja que el paciente acuda acompañado a la clínica, planee bien la hora de la cita y sea puntal para evitar este miedo irracional.

Para los tratamientos de ortodoncia, ¿hay alguna limitación por edad?

La ortodoncia no es un tratamiento limitado a los niños o adolescente. También puede aplicarse en personas adultas. Puede ponerse a cualquier edad para mejorar tanto la estética de la boca como también la funcionalidad, ya que aparte de alinear los dientes también mejora la oclusión. De esta forma se evitan problemas como el desgaste dental, se mejora la higiene dental y se reducen las alteraciones de la articulación de la mandíbula.

¿Cuáles son las enfermedades bucodentales más comunes?

La caries es la enfermedad dental más común, seguida de patologías periodontales como es el caso de la gingivitis y la periodontitis. La caries puede desarrollarse a cualquier edad: niños con dientes de leche, adolescentes y adultos. La caries dental se produce cuando un diente se ve dañado por la acción de las bacterias, que generan ácidos que erosionan su superficie y esmalte. Esto suele provocar un pequeño orificio en la pieza dental, comúnmente conocido como caries. La gingivitis es una afección derivada de la acumulación de sarro en dientes y encías, provocando inflamación y sangrado. La periodontitis, además, también afecta al hueso que da soporte a las piezas dentales. Si no se detecta y trata a tiempo, la periodontitis puede llegar a causar el desprendimiento de dientes y, en los casos más severos, afectar a la salud general del paciente. Para evitar el desarrollo de estas enfermedades bucodentales, se recomienda mantener una higiene bucodental adecuada, así como una alimentación saludable y visitar con frecuencia al dentista.

¿Por qué tengo mal aliento? ¿Se puede tratar?

El mal aliento o halitosis es un olor desagradable que desprende la cavidad oral. Generalmente, esto se produce porque las bacterias en la boca desintegran los resto de comida que quedan en dientes y encías. Este proceso libera un compuesto con un olor desagradable que causa el mal aliento. El 90% de los casos de halitosis tienen su origen en la cavidad oral, y más del 50% de estos están relacionados con enfermedades dentales como la gingivitis y la periodontitis. Otro factor que ayuda a la aparición del mal aliento tienen que ver con la disminución de la producción de saliva. La saliva juega un papel fundamental en la eliminación de restos de comidas y bacterias de la boca. Cuando sus niveles son bajos, las probabilidades de padecer halitosis aumentan. La reducción de saliva suele estar vinculada a la toma de determinados medicamentos, el estrés o los cambios hormonales (menstruación, embarazo...). Además, también puede surgir el mal aliento por otros factores: infecciones de garganta, sinusitis, amigdalitis, trastornos estomacales... Para evitar el mal aliento, hay que cepillarse los dientes correctamente, usar hilo dental, colutorios dentales y raspadores de lengua.

¿Es necesario siempre extraer las muelas del juicio?

La extracción de las muelas del juicio está indicada en el caso de que ocasionen algún tipo de problema, dolor o infección. También es recomendable extraerlas cuando crecen de manera incorrecta o no hay espacio suficiente para ellas y afectan a la posición del resto de dientes.

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